www.magazineinsitu.com
 
 
4 5
06
 ensayos
 proyectos
 entrevistas
 conversaciones
 interferencias
 info
 links
 contacto
3
.



p
uerto de buenos aires - darsena norte- 26 de noviembre - 2005, 20.30 hs.
edición: belén gache - alicia herrero - fernando lópez lage - santiago tavella



donde duermen los hibridos
jacqueline lacasa

una producción de:



En nuestras latitudes, la mirada está empapada de los flujos que aún impone la modernidad como modelo productor de sentido crítico. Este modelo comienza a colapsar cuando se recorren los territorios que conforman la historia del arte. Allí se encuentran “cyborgs” que representan un lugar de tránsito, una zona de contacto.
Estamos ante el desafío de detectar ese espacio de intersección que permita trazar un nuevo mapa donde las fronteras de lo tradicional y lo contemporáneo contacten y se produzca un encuentro. Una forma de responder a este desafío sería encontrar cyborgs en el sentido que plantea Donna Haraway en su manifiesto donde las culturas se transforman a través de la hibridación (la definición más simple de un organismo cyborg es la mezcla de una máquina con un organismo vivo). Esta autora postula que desde finales del siglo XX estamos viviendo en un mundo cyborg que permite transitar todas las fronteras y nuevos espacios.
La aceptación de los cyborgs contiene el germen de la hibridación, allí se naturalizan las fronteras como posibles espacios de encuentro y diálogo para modificar la dinámica de la producción local. La existencia de agentes híbridos, como catalizadores, permite operar generando un nuevo orden: el caos.

El quehacer de los cyborgs

Los cyborgs conviven en medio de las dificultades de siempre, necesitan de ellas para sobrevivir. Sostienen diferentes posiciones acerca de los objetos comunes y prescinden de los espacios convencionales o en su defecto los invaden sin prejuicio.
Consideran que los efectos de implosión son más sugerentes que las visibilidades. Usualmente, trabajan desde cultivos rizomáticos reconstruyendo la trama del tallo subterráneo de manera interdisciplinaria y no se ciñen a un solo territorio. Por lo general se alimentan de cartografías creadas para reconocer su posición y la comparten como forma de alfabetización y esparcimiento viral. Para activar nuevos criterios ponen de manifiesto la esquizofrenia de las máquinas deseantes.
Algunos cyborgs manejan la posibilidad de capturar eventos de la realidad, produciendo una mutación. Por ejemplo, consideran la desaparición de una historia oficial del arte como el inicio de una nueva y vertiginosa forma de crear estudios visuales. La escena de los cyborg es aquella donde cae el disciplinamiento, entienden que el estado de crisis debe ser parte de la organización. Se sumergen en sistemas de inestabilidad y allí bucean sin grandes dificultades. Cuando entran en territorios instituidos, como el cuerpo territorial de la historia del arte, proponen la rapidez de los estudios visuales para acelerar la velocidad y el tiempo. Así, están prontos para trabajar en condiciones de visibilidad mínima y máxima operatividad, capturando puntos de fuga y convirtiendo sus estudios en una amenaza constante a los mecanismos preexistentes de elaboración y conceptualización.

Rutas de acceso.

Los artistas que participan de Magazine In Situ – Backstage fueron consultados acerca de obras o proyectos que, a su entender, configuran un punto de inflexión en la producción de los espacios artísticos. Estas son sus respuestas:
Belén Gache
En 1930, en el Segundo Manifiesto Surrealista, Breton escribía su polémica frase: "El acto surrealista más puro consiste en bajar a la calle revolver en mano y disparar al azar contra la multitud", haciendo referencia al "deseo de acabar de esta manera con el despreciable sistema de envilecimiento y cretinización imperante." Setenta años más tarde, Horacio Zabala presenta en su muestra Futuro Imperfecto su obra Mirá cómo tiemblo, un aerosol que lleva adosado un encendedor de bolsillo: un arma incendiaria potencial, de fabricación casera y económica. La exposición de este objeto como objeto de arte remite a la remanencia del gesto. En un mundo donde “el envilecimiento y la cretinización imperante” parecen inmunes a todo, sólo resta el gesto.

Enrique Aguerre
Como proyecto artístico podría nombrar el trabajo realizado junto a Osvaldo Cibils del 2001 al 2002 -cuando finalmente perdimos pie- en torno a la Galería Lezlan Keplost. Resultado de ese año y medio de trabajo colaborativo y no jerárquico es el cd rom "LK_LAB" que reúne a más de veinte artistas uruguayos que expusieron en la galería y que fueron especialmente invitados para reflejar el "espíritu de la Lezlan Keplost" sin ser un mero registro de lo que allí ocurría.
El espacio creado por Osvaldo permitía el cruce de modalidades y soportes sin ningún tipo de pudor en un medio tremendamente conservador: pintura, objetos, instalación, video, fotografía, netart, música electrónica, escultura, objetos y dibujos así como la posibilidad de mostrar el trabajo de artistas tanto consagrados como debutantes.
Acompañando cada una de las muestras Cibils producía en forma artesanal un pequeño catálogo de tirada reducida que más que documentar la muestra era una suerte de extensión y complemento sutil de la misma. Y en esa idea nos basamos para desarrollar el proyecto "LK_LAB". Cada uno de los artistas invitados aportó fotografías, animaciones, música y textos para ser procesados por nosotros con total libertad de acción. Una vez finalizado el cd rom cada artista recibió una copia del mismo con la condición de que vendieran al menos uno para financiar los costos. De más está decir que no fue un buen negocio desde el punto de vista económico.
Pero sí lo fue la experiencia de producir en forma conjunta un proyecto tan hermoso como inestable llamado "LK_LAB" que debe andar entreverado en alguna que otra pila de discos compactos.


Fernando López Lage
Me voy a referir a la semana de la acción organizada en la fundación de arte contemporáneo en el año 1999, con auspicio de la alianza francesa. Se organizo un evento que implico que durante 6 días artistas que no provenían necesariamente de la disciplina performance, fueron convocados para realizar una acción, un hecho artístico en vivo, un gesto que implicara una idea presentada frente al público. Se hizo una reunión con los artistas convocados que no tuvieron filtros (queríamos que el acto curatorial fuera autónomo) y se planteo la consigna. Se agendaron cinco artistas por día con las diversas necesidades técnicas y se arranco con un público de más de 100 personas por día que hicieron un total de 1000, sumados al final.
Fue un punto de inflexión en la producción de ese momento, porque se organizó desde un grupo de artistas, se convocó a artistas de todas las disciplinas y los campos se cruzaron con comodidad. se reunió al público en un espacio de trabajo no institucionalizado hasta ese momento. Se acerco a gente como Marosa di Giorgio que participó de una acción. Gente que venía de la danza y la música también. Pienso que descongestionó de alguna manera la forma de producir eventos, y desacralizó la impronta que tenían hasta ese momento las instituciones organizando muestras. Además se replanteó el tema de la performance (participaron artistas que provenían de esa disciplina) porque la mayoría de los artistas eran pintores, instalacionistas o escritores. Lo interesante para mi fue como cada uno logró traducir el hecho artístico en una acción concreta. Vila desarticulo su iconografía en una acción donde se desprendía de un maletín un globo inflado de helio con una simple piola donde colgaban sus micro retratos de personalidades de nuestra cultura, mientras un tango imponía "el tempo" a la acción que no implicó nada mas que abrir ese bolso para que el globo quedara suspendido en el aire y dar paso a que el artista se colocara entre el público para ver también que pasaba. De esta actividad también surgieron nombres de artistas jóvenes que hoy ocupan un lugar importante en el campo del arte: Martín Sastre, Julia Castagno, Paula Delgado, Dani Umpi.
Además de todo lo anteriormente dicho, se resignificó el término performance, renombrándolo acción, dando paso a que estos eventos fueran realizados no solo por Clemente Padin u otros clásicos de la performance sino también por artistas como Marosa, Roberto y Riki Musso, Isabel de la Fuente o gente del espacio de Graciela Figueroa abriendo un territorio nuevo en el accionar de ideas.

Harto_espacio
Respondiendo a tu pregunta: nos parece que ha habido un movimiento en la forma de producción en la última década y que ha sido de producción solitaria o aislada a producción colectiva o en red. Como sabes en México unos años antes de mudarnos participábamos de un colectivo artístico que se llama Atlético. Recién llegamos a Montevideo conocimos a Movimiento Sexy y así hemos conocido o hemos sabido de otros tantos colectivos que producen sus eventos con un espíritu parecido. Adelantar es un colectivo. Los colectivos facilitan la tarea de producción.
Las redes facilitan la circulación de la producción. Con harto_espacio tratamos de unir redes de arte. A principios de este año tuvimos la increíble oportunidad de conocer otros proyectos similares en el 1er Encuentro Internacional de Espacios Independientes que se realizó en Valparaiso, Chile. Hoffman's house organizó este encuentro con el fin de presentarse los unos a los otros.

Javier Abreu
Es difícil hablar de "un artista", creo que muchas veces son como situaciones que escapan muchas veces del lugar llamado "arte" lo primero que destaco es un lugar en particular "pachamama" en su primer año de vida ( después ni hablamos fue otra cosa nada que ver) recuerdo los domingos en los que las chicas lindas del centro de diseño industrial mostraban sus "colecciones-primavera verano", en la previa siempre participábamos artistas visuales.
Las primeras acciones performáticas como "ser mujer" y luego woman liberation" acciones generadas por mi pero realizadas por chicas amigas eran muy divertidas, había también body painting,"cantantes de cuarta"...etc.
la gente no entendía nada pero estaba dispuesta a pasarla bien y olvidar el bajón económico de esos años muchos de los que en esos años , quizás hoy tenemos mayor visibilidad en un lugar ahora si "llamado arte" y nuestro trabajo que siempre estuvo hecho con seriedad empieza a ser valorado
esos domingos eran una verdadera fiesta en "ese sótano" de la plaza independencia nos quedábamos veinte o treinta personas "festejando"(?) Hasta las tres de la mañana (un domingo !!!!!!!!!!!)


José Roca
La Bienal de Venecia (de Bogotá).
La discusión sobre actuar dentro o fuera del marco institucional ha sido una constante en el arte colombiano desde mediados de los noventa, y la fuerza de los proyectos de auto-gestión y de curaduría realizada por artistas, ya no en oposición sino como prácticas paralelas a las institucionales, han hecho que muchas de ellas hayan tenido que replantear su papel para recuperar su pertinencia en un medio que se hace cada vez más horizontal, con artistas empoderados que son conscientes de las limitaciones que supone el modelo institucional. Es sintomático de lo anterior que el principal espacio de crítica y reflexión sobre el arte y la cultura contemporáneos en Colombia sea Esfera Pública, un sitio web coordinado por un artista (Jaime Iregui), en donde escribe todo el que quiere y que llega a una comunidad principalmente artística que rebasa las fronteras nacionales.
El arte contemporáneo en Colombia pasa por un muy buen momento, como parece evidenciarlo el interés que ha despertado la obra de los artistas consolidados e inclusive de muchos de los emergentes en el ámbito regional o internacional. Esta situación coincide con uno de los períodos más difíciles por los que ha pasado el país en términos políticos y sociales, lo que parecería darle crédito al cliché que afirma que hay una exacerbación de la energía creativa en tiempos de crisis. Ante la ausencia de un contexto apropiado (museos dedicados al arte contemporáneo, galerías serias, coleccionismo), se ha dado un fenómeno interesante en Colombia. Los artistas han decidido pasar a la acción a través de iniciativas individuales que en muchos casos han logrado integrar en torno a sí a toda la comunidad artística, convirtiéndolos en medios muy efectivos de animar la discusión. Esta voluntad de actuar en contextos en los que normalmente no hay actividad artística se ha materializado en una serie de proyectos que ha desplazado el marco de acción usual hacia otros espacios. Es interesante cómo en muchas ocasiones se recurre al equívoco, al juego de palabras y al desplazamiento de una práctica de un contexto a otro para lograr visibilidad. Me referiré a algunos de ellos.
Un proyecto que comenzó casi como un chiste de estudiante se ha desarrollado hasta ser un evento de gran importancia para la comunidad en la que se realiza, a la vez que ya ha tomado una cierta relevancia para el medio artístico “formal”. Aguirre y otros artistas de la Universidad Nacional se agrupaban en un colectivo conocido como Las Matracas, y como tal realizaban acciones y obras colectivas. Ante la dificultad de participar en eventos internacionales (como la Bienal de São Paulo o la Bienal de Venecia, para las cuales el representante por Colombia es escogido por el Consejo de Artes del Ministerio de Cultura), decidieron crear su propio evento, la Bienal de Venecia (de Bogotá), en el popular barrio Venecia de la capital colombiana. Alejado del centro de la ciudad y de toda actividad cultural, biblioteca o museo, Venecia es el contexto más ajeno a la actividad artística que se pueda escoger. Jugando con el equívoco que genera el nombre, Franklin Aguirre y sus compañeros lograron un acercamiento que funcionó en dos sentidos: de una parte, todo el medio artístico se desplaza al barrio Venecia para visitar la Bienal (que ya ha hecho más de cinco ediciones). De otra, la comunidad local, que en un inicio se mostró desconfiada, se ha involucrado de una manera activa en la realización de la Bienal, y la presencia de intervenciones de artistas en los espacios públicos, tiendas y casas de los residentes es algo ya integrado socialmente: la usual prevención frente al arte contemporáneo, “¿es esto arte?”, no se da, tal vez porque las nociones tradicionales de obra artística nunca formaron parte de la realidad de este grupo social. Sobra decir que para la comunidad del barrio, en el título de la Bienal de Venecia no hay ironía alguna: es la que ellos conocen; la que se realiza (según les han contado) en Italia, es definitivamente “la otra”.

Juliana Rosales
La ciudad donde nací se inunda cada dos o tres años. Como mucho de lo que vivimos cuando somos chicos, el recuerdo de Mercedes inundado es mágico: andaba en bote por la calle, se podía entrar a las casas por las ventanas, y por un tiempo vivía de campamento en una casa que alguien les prestaba a mis padres.
Mucho tiempo después buceé un poco: abajo de la superficie lo que conocemos como colores, sonidos y texturas cambia. Tenemos que estar bajo control, ya que el peso, la velocidad de nuestro cuerpo son diferentes.
Hace más o menos diez años conocí la obra de Bill Viola, la que no sé si marca un punto de inflexión en mi trabajo o en el campo del arte contemporáneo. Lo que si había allí era esa extrañeza que recordaba, que había visto/oído/tocado.

Luis Camnitzer
Algunas manifestaciones de los hackers (X-Ploit por ejemplo en relación al movimiento zapatista). Los hackers son los herederos del conceptualismo político latinoamericano y logran manifestarse en un circuito independiente del mercado, afectando la cultura en una forma mucho mas radical que cualquier objeto artístico.

Santiago Tavella
Magazine In situ-Backstage como proceso de intercambio regional, específicamente entre Buenos Aires y Montevideo, del cual he participado en diferentes disciplinas, como curador, artista, músico, creo que es un proceso incipiente pero del cual ya se están viendo algunos resultados, me interesan particularmente los que están relacionados con la influencia de los intercambios en los procesos creativos y de producción, que se dan en los diferentes agentes que participan de estos procesos.


Estrategias comunes

“Zona de contacto y trabajo en red,” son los principales elementos que se encuentran presentes en muchos de los proyectos mencionados anteriormente. También tienen en común la urgencia desde la cual surgen como forma de sortear las limitaciones del presente. Cada una de estas experiencias constituyen los lugares donde duermen los híbridos, señales profundas que finalmente emergen.

Magazine In Situ Backstage
Buenos Aires 2005


jacqueline lacasa

Es Licenciada en Psicología. Integra la Fundación de Arte Contemporáneo y la Asociación Uruguaya de Críticos de Arte. Ha participado en numerosas muestras colectivas e individuales entre las que se destacan: “In utero” (2004) , “Leo Toy Company” (2005) y “13 curadores, 13 artistas” (2005). Ha recibido el tercer premio en el Concurso Paul Cezane organizado por la embajada de Francia en el año 2004 y fue seleccionada por la Fundación OSDE en el mismo año. Seleccionada para participar en la Bienal de Arte del Mercosur 2005. Ha publicado un ensayo y varios números del periódico de “La hija Natural de JTG”. Publica regularmente en la Sección Cultural del diario La República y escribe para la revista ARTE: de APEU (Asociación de Pintores y Escultores del Uruguay). Asimismo trabaja como curadora independiente.

 

 

 

conversaciones
   
1

 
   



 
3